Batalla de
Xaquixahuana
Batalla de Xaquixahuana, combate librado
el 9 de abril de 1548 entre las fuerzas de Gonzalo Pizarro y las del ejército
real mandado por Pedro de La Gasca, que tuvo lugar en la llanura peruana
homónima (también transcrita como Jaquijaguana o Jaquijahuana), situada a
25 km de Cuzco. La Gasca dirigía una expedición contra los pizarristas
sublevados, que habían dado muerte en 1546 al virrey Blasco Núñez Vela. Este
último había traído órdenes para suspender todas las distribuciones de tierra
(encomiendas) que los hermanos Pizarro habían hecho entre sus compañeros de
armas, mientras no contasen con la ratificación de la Corona. El asesinato de
Núñez Vela puso a los pizarristas fuera de ley, a lo que éstos respondieron con
una rebelión abierta que les hizo dueños del Perú y prácticamente
independientes. Sin embargo existían entre ellos fuertes disensiones, que se
manifestaron cuando La Gasca dirigió el ejército real desde Tierra Firme hasta
el corazón de los dominios incas controlados por los sublevados. Éstos
decidieron hacerle frente en Xaquixahuana.
Al poco de iniciarse la batalla, el
capitán Sebastián Garcilaso de la Vega, que mandaba un escuadrón de los
rebeldes, desertó con sus tropas, a lo que siguió el desmoronamiento del frente
pizarrista. Abandonado por sus partidarios, Gonzalo Pizarro se entregó al
ejército real. Poco después Pizarro y su lugarteniente Francisco de Carvajal fueron
ejecutados en Cuzco. Este episodio supuso el final de las luchas civiles entre
los conquistadores en el Perú y puede decirse que entonces comenzó la auténtica
colonización del país de los incas.