El invento de las Lenguas camitosemíticas
Lenguas camitosemíticas, principal familia de lenguas del norte de África y de Oriente Próximo. Algunos estudiosos las denominan afroasiáticas por su distribución geográfica, y cuentan con unos doscientos millones de hablantes. Se ha pensado que procedía de una lengua madre que existió en torno al siglo VII a.C., pero las lenguas más antiguas del grupo están fechadas a partir del tercer milenio antes de Cristo El nombre de camito-semíticas, aunque arraigado, conduce a error, porque sugiere la idea, hoy desautorizada, de que esta familia de lenguas tiene dos ramas principales cuando se admite que existen seis ramas o subfamilias igualmente independientes: la semítica, la bereber, la egipcia, la cusita, la omótica, y la chad. Las seis ramas presentan bastantes similitudes sintácticas, morfológicas, fónicas y léxicas lo que demuestra su origen común. No obstante, algunas escuelas científicas debaten la relación de las lenguas chad con las camito-semíticas.
Las lenguas semíticas incluyen el árabe, el hebreo, el amárico (lengua oficial de Etiopía) y otras hoy desaparecidas, como la asirio-babilónica o acadio, el arameo, el fenicio, el moabita y algunas otras. La rama egipcia del grupo camito-semítico está formada por la antigua lengua egipcia, incluida la lengua copta o copto, que ha pervivido hasta el siglo XIV. La rama bereber está constituida por el tuareg y otras lenguas que hablan en el norte y noroeste de África unos doce millones de hablantes. De ellos, muchos son bilingües utilizando el árabe tanto como su lengua bereber, que escriben con caracteres árabes. Las lenguas cusitas se hablan en Etiopía y Somalia, a lo largo del mar Rojo, por trece millones de personas; está formado este grupo por el galla (que hablan en Kenia y en el sur de Etiopía) de escritura en caracteres etíopes, y el somalí en caracteres latinos. En el África central y occidental se hablan las lenguas chad. La más importante de ellas es el hausa, lengua originaria del norte de Nigeria y áreas limítrofes, y que también sirve como lengua franca de la zona para millones de hablantes no nativos. Siempre se usaron caracteres árabes en su escritura, pero en el siglo XX empieza a escribirse con el alfabeto latino. En el oeste de Etiopía y el norte de Kenia existen en torno a veinte lenguas omóticas habladas por casi dos millones de mujeres y hombres. Véase también Lenguas africanas.