La cerradura
Los chinos parecen ser los inventores de la cerradura hace unos 4,000 años. Los mecanismos eran muy rudimentarios, generalmente se trataba de un pestillo o vástago que se podía corer desde el lado exterior de una puerta o portón usando una pieza de metal. Más tarde los egipcios mejoraron las cerraduras haciendo que el perfil de la llave moviera los pequeños vástagos que cerraban o abrían.
|
Durante la edad media se usaron varios tipos de cerraduras y candados para asegurar propiedades, y, hasta para preservar la honradez de la mujer en los cinturones de castidad.
Desde fines del siglo XVIII se inventaron y mejoraron varias clases de cerraduras, hasta 1868 en que un norteamericano , Yale, sacó al mercado su famosa cerradura cuyo uso se expandió enormemente. La cerradura de garfio “Segal”, fue inventada según se cuenta, por un presidiario, Mr. Segal, que cumplía condena por tener la habilidad de abrir toda clase de cerraduras. En la cárcel Segal se puso a diseñar una cerradura que a l mismo le resultara imposible abrir. Y así surgió la cerradura de garfios, así llamada, porque una parte de ella, la montada en la puerta movible, engancha los garfios en la parte de la puerta fija, haciendo imposible que se emplee la llave especifica.
Aunque este tipo de cerradura también la podía abrir un cerrajero experto sin la llave, sigue siendo en la actualidad la que más seguridad ofrece, evitando el desmontar el picaporte o pestillo del cerrojo.
Una cerradura es un mecanismo de metal que se incorpora a puertas y cajones de armarios, cofres, arcones, etc., para impedir que se puedan abrir y así proteger su contenido.
Este mecanismo se puede accionar mediante una llave de metal, normalmente acero. En la actualidad, aparte de las cerraduras mecánicas, existen otras como las electro-mecánicas o las electrónicas, en las que la llave puede ser una tarjeta de plástico o PVC. La llave encaja en la cerradura por el llamado "ojo", que es un agujero situado normalmente en la parte central del cilindro de la cerradura.
En la actualidad, aproximadamente el 80% de las cerraduras con cilindros mecánicos (con llaves de dientes de sierra o de puntos) e incluyendo entre estas a las de las puertas de seguridad y acorazadas, han dejado de ofrecer la seguridad con la que fueron concebidas a causa de la difusión por internet de técnicas como la del bumping -hasta ahora utilizada en asaltos por bandas organizadas pero hoy accesible a todo tipo de delincuentes- que suponen un riesgo evidente para sufrir accesos indeseados, robos y hurtos. Por ello la tecnología ofrece soluciones aplicadas a las cerraduras que aportan verdadera seguridad, como el caso de las cerraduras con cilindros electrónicos, con el sistema BlueChip o similar.
Se llama cerrajero al oficio o artesano que fabrica, repara o instala cerraduras.
la cerradura se utiliza para cerrar
Este mecanismo se puede accionar mediante una llave de metal, normalmente acero. En la actualidad, aparte de las cerraduras mecánicas, existen otras como las electro-mecánicas o las electrónicas, en las que la llave puede ser una tarjeta de plástico o PVC. La llave encaja en la cerradura por el llamado "ojo", que es un agujero situado normalmente en la parte central del cilindro de la cerradura.
En la actualidad, aproximadamente el 80% de las cerraduras con cilindros mecánicos (con llaves de dientes de sierra o de puntos) e incluyendo entre estas a las de las puertas de seguridad y acorazadas, han dejado de ofrecer la seguridad con la que fueron concebidas a causa de la difusión por internet de técnicas como la del bumping -hasta ahora utilizada en asaltos por bandas organizadas pero hoy accesible a todo tipo de delincuentes- que suponen un riesgo evidente para sufrir accesos indeseados, robos y hurtos. Por ello la tecnología ofrece soluciones aplicadas a las cerraduras que aportan verdadera seguridad, como el caso de las cerraduras con cilindros electrónicos, con el sistema BlueChip o similar.
Se llama cerrajero al oficio o artesano que fabrica, repara o instala cerraduras.
la cerradura se utiliza para cerrar
Clases de cerraduras
- Cerradura de bombillo. La que abre con llave que tiene hendiduras longitudinales en su tija actuando como el émbolo de una bomba.
- Cerradura de combinación. La que solo se puede abrir de un modo determinado.
- Cerradura de dos pestillos. La que los tiene, uno de llave y otro de picaporte.
- Cerradura de dos vueltas. Aquélla en que sale el pestillo en dos veces, cada una a cada vuelta de la llave.
- Cerradura de golpe. La de resorte que cierra con solo empujar la puerta.
- Cerradura de guardas movibles. La que para mayor seguridad tiene estos accesorios.
- Cerradura de loba. Aquélla en que los dientes de las guardas son semejantes a las del lobo.
- Cerradura de llave de pezón. La común de llave maciza que se puede abrir por los dos lados.
- Cerradura de molinillo. Antiguamente, la que tenía el caño por donde entra la tija de la llave, movible y giratorio sobre el palastro de la cerradura.
- Cerradura de secreto. La que una vez cerrada solo se puede abrir de una manera determinada.
- Cerradura de vuelta y media. La que primero actúa como llave y luego como picaporte.
- Cerradura empanada. La que resulta introducida en una caja en el grueso de larguero de la hoja en que se coloca.
- Cerradura guarnecida al revés. La más ordinaria que deja ver su mecanismo después de montada.
- Cerradura recercada. La que oculta su mecanismo dejando ver el pestillo cuando sale hacia el cerradero.