Lazarillo de Tormes, novela picaresca española de autor desconocido, considerada por muchos críticos literarios como la primera novela moderna. Aunque probablemente existió una edición anterior, quizá de 1552 o 1553, las primeras ediciones conservadas son las de 1554, impresas en Burgos (Juan de Junta), Amberes (Martín Nucio) y Alcalá de Henars (Salcedo), con el título de La vida del lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades.
Los críticos no se ponen de acuerdo en cuanto a la fecha de redacción, debido a que las pocas referencias históricas que ofrece el texto no son fáciles de rastrear. El supuesto anticlericalismo del Lazarillo de Tormes ha llevado también a la polémica entre los estudiosos de la obra respecto a su autoría. Entre ellos, Américo Castro defiende que el autor debió ser un converso, mientras que Manuel J. Asensio postula la existencia de un escritor impregnado de espíritu erasmista.
El Lazarillo de Tormes consta de siete capítulos o “tratados” de muy variable extensión. Es una novela escrita en primera persona, a la manera de carta dirigida a una persona de rango superior (“vuestra merced”), en un acto de obediencia y rendición de cuentas, sin comentarios ni reflexiones de orden moral. En este autobiografismo reside la primera gran innovación de las muchas que presenta la obra: el Lazarillo de Tormes es la narración de la trayectoria vital de un ser de vergonzosa extracción social y de su lucha por la supervivencia.
Lázaro, antihéroe por excelencia, nos proporciona datos sobre su vida: nació junto al río Tormes, en Salamanca, y es hijo de un molinero y de una viuda amancebada con un negro. Por la obra desfilan los diversos amos a los que ha servido y de los cuales se ha aprovechado invariablemente: el mendigo ciego y ruin, el cura avaro, el escudero deseoso de aparentar, el fraile de la Merced, el buldero (un clérigo dedicado al lucrativo negocio de vender bulas papales), el capellán o el alguacil. El protagonista de la novela vivirá una sucesión de experiencias que irán paulatinamente socavando su integridad moral, en un proceso educativo subvertido. Finalmente, Lázaro obtendrá el oficio real de pregonero en Toledo y nos cuenta cómo un arcipreste le propone el matrimonio con su criada, que además es también su barragana. Desde esa situación actual vergonzante, Lázaro refiere su caso a esa “vuesa merced” que aparece ya en el prólogo.
El autor del Lazarillo de Tormes aprovecha elementos preexistentes en la tradición folclórica (el propio protagonista está inspirado en materiales tradicionales), así como motivos pertenecientes a la literatura culta, para contarnos la historia de una vida, en un relato que es fiel reflejo de la incertidumbre de la España de la Época, expuesta a una grave crisis económica y a una profunda miseria moral. Esta obra, prototipo de la novela picaresca que florecería en la literatura española de comienzos del siglo XVII, muestra una visión pesimista de la sociedad a través de los ojos de un pícaro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario